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GameGear y su eterno problema con los condensadores quemados

La consola portátil de SEGA, Game Gear, dio mucho de qué hablar durante su época al ser uno de los primeros dispositivos para videojuegos portátil con pantalla a color que se daba codazos con Lynx de Atari y la Turbo Express.

Fue así como en 1990 fue lanzada esta maravilla innovadora en su natal Japón para luego abrirse paso por Estados Unidos y Europa seis meses después.

Además de ser conocido por traer una nueva experiencia con tecnología superior para los gamers de aquel tiempo, también se habla mucho del Game Gear por cómo fracasó rotundamente.

Su principal atractivo, la pantalla a color, en realidad le jugó en contra cuando los usuarios se dieron cuenta que el aparato consumía seis baterías alcalinas AA en tan solo cuatro horas de juego, teniendo que optar por conectarlo a la corriente para seguir jugando, matando por completo su funcionalidad portátil.

Debido a esto, los usuarios prefirieron seguir usando los portátiles monocromáticos que podían funcionar perfectamente con baterías por más de diez horas, un aspecto que mantuvo al Game Boy en el trono a pesar de las maravillosas novedades del Game Gear y de otras consolas.

Y cualquiera pensaría  que quien estuviera dispuesto a sacrificar la portabilidad por una experiencia videojuegos a todo color preferiría por encima a esta consola, lo cierto es que incluso en este modo de alimentación también trajo graves problemas a sus usuarios.

Usuarios del Game Gear se quejan de sus continuas descomposturas

La joya en la corona de Game Gear fue sin duda su pantalla a todo color retroiluminada que permitía jugar incluso en condiciones de poca luz muy a comparación de los clásicos Game Boy que solo se podían jugar de día o con una luz cerca.

Además tenía una paleta de 4096 colores muy al contrario de los monocromáticos que abundaban en ese entonces, y con una mejor resolución, además de poseer un mejor sonido.

Esta fue la razón por la cual este dispositivo prácticamente “comía” baterías sin parar resultando costoso el mantenerlo simplemente encendido. Para resolverlo, los jugadores tenían que conseguirse un eliminador compatible para conectarlo a la corriente, haciendo uso principalmente el de las consolas Master System o Mega Drive.

Pero fue ahí cuando la mala calidad de los componentes con las que estaba fabricado salió a la luz trayendo problemas como fallas gráficas y sonido distorsionado debido a que los condensadores se hinchaban.

El problema no se quedó ahí, luego de hincharse, los condensadores derramaban sustancias que comenzaban a corroer las soldaduras, la placa madre y ponían en riesgo la integridad de otros componentes cercanos.

Los síntomas de este problema normalmente iniciaban con pérdida del sonido, luego afectaba al vídeo de forma progresiva perdiendo nitidez obligando a los usuarios a subir al máximo el nivel de contraste y jugar con la pantalla inclinada, hasta que finalmente el aparato quedaba inutilizable.

Solución al problema de los condensadores del Game Gear

La recomendación para cualquier usuario que aún cuente con un Game Gear en sus manos, es siempre la de cambiarle todos los condensadores incluso si aún está en buenas condiciones, pues tarde o temprano los problemas con estos componentes ocurrirán y sería un verdadero problema tratar de repararlos después.

Por fortuna, el reemplazo es muy fácil de realizar incluso si se tiene conocimientos básicos de electrónica, o se le puede pedir a un técnico de reparación realizar este procedimiento que no debería ser nada costoso.

Solo basta con abrir el aparato para identificar los condensadores (cuadrados y visiblemente de mala calidad) y revisar el valor nominal, el voltaje, la ubicación y la polaridad. Luego solo es cuestión de comprar otros condensadores (los cilíndricos) con los valores equivalentes en cualquier tienda de electrónica.

Se recomienda hacer un croquis o dibujo donde se señale en qué parte va cada condensador y escribir sus características antes mencionadas para no equivocarse. Es muy importante también señalar cómo está dispuesta polaridad de cada uno de ellos con respecto a la placa.

En diferentes sitios en internet se puede tener acceso a la lista de los condensadores a comprar, ahora solo falta sacar el cautín y el estaño, y ponerse manos a la obra para darle muchos más años de vida a esa consola que nos dio una maravillosa infancia.